El trabajo con adultos, bien sea de manera individual, en pareja o con el grupo familiar, implica tener en cuenta a la persona en su globalidad. Igualmente, es preciso valorar la complejidad que entraña el desarrollo de las mismas en los diversos ámbitos de la vida y cómo una situación adversa o conflicto en un área (laboral, social o familiar) puede interferir en las otras, generando una situación de descontento o malestar. 

Por ello, Grupo ASOCIA cuenta con profesionales especializados en psicoterapia y psicodiagnóstico clínico. Además estos profesionales acreditan una experiencia que permite ofrecer una atención idónea, que tiene en cuenta la problemática individual en inter-relación con el contexto personal y relacional que implica el mundo adulto y social, focalizándose en las necesidades particulares que cada situación requiera. 

Dentro de los diversos formatos psicoterapéuticos que se ofrecen, encontramos: 

La psicoterapia individual, como un espacio desde donde superar y trabajar sobre aquellas situaciones complejas, que generan algún tipo de preocupación o malestar y que abarcan una multiplicidad de aspectos o situaciones en las que el  adulto, hombre o mujer, se ve inmerso. Algunos ejemplos frecuentes  que son motivo de consulta son: estrés, ansiedad, depresión, conflictos relacionales o interpersonales, trastornos del sueño, del estado de ánimo, fobias, dificultades en la relación con la pareja,  obsesiones, dificultades laborales, entre otros. 

Dentro de los formatos psicoterapéuticos para adultos, también  encontramos la psicoterapia en pareja para aquellos casos donde las circunstancias vitales y/o personales hacen que surjan dificultades en la convivencia, en el entendimiento mutuo, en los deseos respecto de proyectos presentes o futuros o en el área sexual entre la pareja.

Asimismo, también encontramos la psicoterapia familiar, orientada específicamente a las dificultades que surgen en el grupo familiar como un todo,  y no tanto referidos a la pareja parental en sí mismos. Se interviene sobre la dinámica familiar en su totalidad, previa evaluación. En estos casos, se realiza una evaluación dinámica de la familia y se interviene sobre aquellas áreas que generan una problemática o disfuncionalidad en la misma, trabajando sobre patrones relacionales, comunicativos y/o conductuales de la estrucutura familiar.